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Nombre:SadakoSadako
De:Una pequeña ciudad del mundo
Sobre mí:Los que me conozcan, que opinen sobre mí ;)
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Me gusta... Odio...
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  • Adoro: Leer, ir al cine, escuchar música, hablar con las personillas importantes por el msn, salir con mis amigos y... pasar un buen rato ^^
  • Mi música: Evanescence, Avril Lavigne, Black Eyed Peas, Green Day, El canto del loco, La Oreja de Van Gogh... de todo un poco^^
  • Mis libros: uf... imposible elegir xD
miércoles, noviembre 15, 2006,7:45 a. m.
Pelusas y espinas
Puede que muchos de vosotros hayáis hecho este ejercicio en alguna convivencia o en algo parecido. Es un buen ejercicio de comunicación ^^. Buscando, he encontrado este cuentecillo, en el que se narra esta historia (es un pelín largo, pero merece la pena ^^)

“Érase una vez, hace mucho tiempo, dos personas muy felices que se llamaban Tim y Maggi y tenían dos hijos, llamados Juan y Lucy.. Para comprender cuan felices eran, hay que explicar cómo eran las cosas entonces.En aquellos días felices se les regalaba a todos, nada más nacer, una pequeña y suave Bolsa de Pelusa. Cada vez que una persona metía la mano en su bolsa podía sacar una Pelusa Caliente.Había mucha demanda de Pelusas Calientes, porque cada vez que alguien recibía una ésta le hacía sentirse contento y abrigado. La gente que, por alguna circunstancia, no recibía Pelusas Calientes con regularidad, corría peligro de contraer una enfermedad en la espalda que los encogía y, a veces, podían incluso morir.En aquellos días, era muy fácil obtener Pelusas Calientes. Cada vez que a alguien le apetecía, podía ir a tu encuentro y decirte: “Me gustaría recibir una Pelusa Caliente”; entonces uno metía la mano en su bolsa y sacaba una Pelusa del tamaño de la mano de una niñita. Con la luz del día, la Pelusa sonreía y florecía, transformándose en una Pelusa Caliente amplia y acogedora. Entonces se colocaba encima del hombro, la cabeza o las piernas de la persona, y la Pelusa se acomodaba perfectamente, deshaciéndose contra su piel y haciéndola sentir llena de alegría.La gente siempre se estaba pidiendo mutuamente Pelusas Calientes y, puesto que eran gratis, no había problemas para conseguir suficientes. Al haber para todos, las personas se sentían muy cómodas y abrigadas la mayor parte del tiempo.Pero un día, un brujo malo se enfadó porque todos eran felices y no le compraban pociones y ungüentos. El brujo era muy listo e ideó un plan perverso. Una hermosa mañana se acercó cautelosamente a Tim, mientras Maggi jugaba con su hijita, y le susurró al oído:“Mira Tim, fíjate en todas las pelusas que Maggi da a Lucy: si continúa así va a agotarlas y no quedará ninguna para ti”.Tim se quedó estupefacto. Se volvió al brujo y le dijo: “quieres decir que no siempre encontraremos una Pelusa Caliente en la bolsa cuando la busquemos?”Y el brujo contestó: “por supuesto que no, cuando las agotes, ya no tendrás más”.Y dicho esto, se fue volando, riendo y cacareando.Tim se lo tomó muy a pecho y comenzó a controlar cada vez que Maggi le daba una Pelusa a alguien. Acabó por sentirse muy preocupado porque a él le gustaban mucho las pelusas calientes de Maggi y no quería que se las diera a los demás. Realmente creía que Maggi no tenía derecho a gastar todas sus Pelusas Calientes con los niños y otras personas. Empezó a quejarse cada vez que veía a Maggi dar una Pelusa Caliente a alguien, y como Maggi lo quería mucho, dejó de dar Pelusas Calientes con tanta fecuencia y las reservó para él.Al ver esto, los niños pensaron que era malo regalar Pelusas Calientes cada vez que se las pedían o les apetecía hacerlo. También ellos se volvieron muy cuidadosos, vigilaban estrechamente a sus padres y cuando les parecía que daban demasiadas Pelusas Calientes a alguien, protestaban. Poco a poco comenzaron a preocuparse por las Pelusas Calientes que daban ellos mismos. Aunque ciertamente encontraban Pelusas cada vez que las buscaban en su bolsa, cada vez metían menos la mano dentro y se hicieron más y más tacaños. Muy pronto la gente notó una escasez de Pelusas Calientes, y comenzaron a sentirse menos contentos y abrigados. Empezaron a encogerse y, de vez en cuando, moría uno por falta de Pelusas Calientes.Así, más y más personas iban a comprarle pociones y ungüentos al brujo, aunque no parecían muy efectivos. Y sucedió que la situación comenzó a ponerse muy difícil. El brujo malvado no quería que la gente muriera, entre otras cosas, porque los muertos no pueden comprar pociones ni emplastos, así que desarrolló un nuevo plan: le dio a cada uno una bolsa muy similar a la Bolsa de Pelusas, excepto que éstas eran frías, mientras, como es sabido, las auténticas Bolsas de Pelusas eran Calientes. Dentro de la bolsa del brujo había Espinas frías. Estas Espinas Frías no hacían que la gente se sintiera contenta y abrigada, sino, por el contrario, fría y pinchada, pero evitaban que a la gente se le encogiera la espalda y muriera. Por lo que, desde entonces, cada vez que alguien decía “quiero una Pelusa Caliente”, le contestaban: “No puedo darte una Pelusa Calientes, pero, ¿quieres una Espina Fría”?A veces se acercaban dos personas pensando obtener una pelusa caliente, pero uno y otro cambiaban de opinión y terminaban dándose Espinas Frías. Así sucedió que, aunque muy pocas personas morían, muchos seguían desdichados y sintiéndose frías y pinchadas.La situación se complicó muchísimo, pues las Pelusas Calientes que antes solían ser gratuitas como el aire, ahora eran extremadamente caras y muy caras. Eso ocasionó que la gente hiciera cualquier cosa para conseguirlas.Antes de que el brujo apareciera, la gente acostumbraba a reunirse en grupos de tres, cuatro o cinco personas, sin importarles demasiado quién daba Pelusas Calientes a quién. Después de que llegara el brujo, la gente comenzó a emparejarse y a reservar todas sus Pelusas para sus parejas. Los que se descuidaban y daban una Pelusa a alguien más se sentían culpables, porque sabían que su pareja seguramente notaría la pérdida. Y los que no encontraban una pareja generosa tenían que comprar sus Pelusas y trabajar muchas horas para poder pagarlas.También sucedió que algunas personas cogían Espinas Frías (habían muchas y eran gratis), las cubrían de un material blanco y esponjoso, y las hacían pasar como Pelusas Calientes. Estas Pelusas Calientes falsificadas eran realmente Pelusas de Plástico y aún ocasionaron más dificultades: si, por ejemplo, dos personas intercambiaban libremente Pelusas de Plástico, se supone que tenían que sentirse bien por ello, pero, en cambio, se separaban sintiéndose mal. Y como pensaban que lo que se habían estado dando eran Pelusas Calientes, se quedaban muy confundidas, sin darse cuenta de que esos sentimientos fríos e hirientes que tenían eran el resultado de haberse dado un montón de Pelusas de Plástico.De esta forma, las cosas se pusieron muy, muy tristes desde la llegada del brujo que hizo que la gente creyera que algún día, cuando menos lo esperaban, no encontrarían más Pelusas Calientes en sus Bolsas.No hace mucho tiempo, una adorable y robusta mujer de anchas caderas y feliz sonrisa, llegó a ese país entristecido. Parecía no haber oído hablar del brujo, y no le preocupaba que se acabaran sus Pelusas Calientes. Las daba libremente, incluso cuando no se las pedían. Algunos no las aceptaban, porque hacía que los niños se despreocuparan de que se les acabaran las Pelusas Calientes. En cambio a los niños les gustaba mucho, porque se sentían bien con ellas. Y pronto volvieron a dar Pelusas Calientes siempre que les apetecía.Las personas mayores comenzaron a preocuparte y decidieron utilizar la Ley para proteger a los niños del derroche de sus reservas de Pelusas Calientes. La ley convirtió en una actividad criminal dar Pelusas Calientes de manera descuidada, sin licencia. Sin embargo, muchos niños parecían no enterarse y, a pesar de la Ley, continuaron dándose Pelusas Calientes unos a otros siempre que les apetecía y siempre que se las pedían. Y como había muchos niños, casi tanto como mayores, parecía que podrían salirse con la suya.Hoy por hoy, es difícil adivinar qué sucederá. ¿podrán las fuerzas de la ley y el orden detener a los niños? ¿Irán las personas mayores a unirse a aquella mujer y a los niños para darse cuenta de que siempre habrá tantas Pelusas Calientes como se necesiten? ¿Recordarán Tim y Maggi aquellos días en los que eran tan felices, sabiendo que había Pelusas Calientes en cantidad ilimitada? ¿Las volverán a dar libremente?Este asunto se extiende por toda la tierra y probablemente la lucha esté llegando a donde tú vives. Si lo deseas, y ojalá así sea, puedes unirte dando y pidiendo libremente Pelusas Calientes, y siendo todo lo amoroso/a y sano/a que puedas”.

Da que pensar ¿verdad? Al igual que los pequeños detalles, como puse en una entrada anterior, las pelusas calientes son gratis, y no cuesta animar el día a alguien con ellas. Pero siempre tenemos el riesgo de toparnos con una espina fría, que nos hará daño, y que, desafortunadamente también son gratis. Por eso yo os invito a todos a que metáis la mano en vuestra bolsa de Pelusas calientes y regaléis algunas a vuestros seres queridos, y que siempre lo hagáis, ya que no se os acabarán nunca ^^. Ahora mismo meteré la mano en la mía y os regalaré una:

Quería daros las gracias por estar siempre ahí, a mi lado, pase lo que pase. Sois una parte importantísima de mi vida y sin vosotros muchas veces me sentiría perdida. He pasado momentos buenísimos con vosotros, y ahora mismo no me viene a la cabeza ninguno malo. Gracias por comprenderme y escucharme, por animarme cuando estaba triste, por ayudarme cuando lo necesitaba y, sobre todo, por estar ahí. Gracias de todo corazón ^^
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jueves, noviembre 09, 2006,11:37 a. m.
Son canciones...
Bueno, ya era hora de que pusiese yo el test ese de las narices ¿no? xDD.
Me he tenido que comer mucho la cabeza, pero al final, más o menos, me ha salido ^^
Primero pondré las reglas del jueguecito este:

Este cuestionario tiene efecto rebote. Los citados al final tienen que hacerlo de la misma manera que yo. Ellos, a su vez, tienen que escoger a cinco víctimas. La mecánica es la siguiente: escoge un grupo o un solista y responde a las preguntas usando títulos de canciones de ese grupo o solista. Novedoso, no? No vale devolver!

Ale, pongo el test:

Solista o grupo elegido: Avril Lavigne
¿Eres hombre o mujer? He Wasn’t
Descríbete: Mobile
¿Qué sienten las personas acerca de ti? To much to ask
¿Cómo describirías tu anterior relación sentimental? My happy ending
Describe tu actual relación: Thing’s I’ll never say
¿Dónde quisieras estar ahora? Knocking on heaven’s door
¿Cómo eres respecto al amor? Complicated
¿Cómo es tu vida? Who knows
¿Qué pedirías si tuvieras un solo deseo? My world
Escribe una cita o frase sabia: I’m with you
Ahora despídete: Take me away

Bueno, ya está ^^.
Y como no he podido poner la de Sk8er Boy en ningún sitio y es una de mis canciones favoritas, os pongo el vídeo (y no, no me estoy copiando, personilla xD)
¡Besooos!

Edito: Vale, estoy tonta xDD. Se me olvidó retar a la gente ^^''
Venga, reto a...
-Ángelalado
-Arwen
-Hanäis
-Noira
Y si ya las han retado... se sieeeeeeeeente ^^

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viernes, noviembre 03, 2006,8:22 a. m.
Un mundo ideal
En efecto, llego a la entrada que hace alusión al título del blog.
Un mundo ideal... qué bien suena ¿verdad? Un mundo en el que la palabra miedo o tristeza no existen.
¿Llegaremos algún día a lograr llegar a él? Permitidme que diga que cada vez lo dudo más, sobre todo al ver el telediario. Cada día que encendemos la televisión o leemos cualquier periódico podemos ver lo mismo: muerte y destrucción. Parece ser que el mundo se destruirá a si mismo, y no harán falta ni uno ni cuatro jinetes del Apocalipsis para dar fin a nuestra era.
Aunque no debemos dejar llevarnos por el pesimismo, ya que así sólo haremos que el mundo nos parezca más duro de lo que es en realidad. Debemos hacer todo lo que esté en nuestra mano por cambiarlo, pero también tenemos que saber que si los grandes líderes pretenden jugar con nosotros como si se tratase del playmobil, no podemos hacer nada... qué injusto es.
Guerras, violencia, maltrato, insultos, desesperación, miedo, agonía, robos, injusticia... son algunas de las palabras que más se usan para describir la situación ahora mismo, pero también alegría, sonrisa, salvación, amistad, abrazo, amor, unión, descubrimiento...
Lo dicho, siempre hay que mirar hacia delante, no hacia atrás, porque así conseguiremos, poco a poco, llegar a nuestro propio mundo ideal, en el que podremos ser felices con las personas a las que más queremos. Porque un mundo ideal no es un sitio en el que vivamos en paz, sino agusto. Salir con los amigos, hacer cosas que nos gusten, hablar con la gente a la que más queremos, encontrar el amor... es nuestro propio mundo ideal, un mundo que, espero, todos encontremos algún día ^^

En fin, mientras cada uno de nosotros seguimos buscándolo, yo os dejo con el de Yasmín y Aladdín, que sí que lo encontraron, encontrándose el uno al otro.




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